cuando la expresión trasciende la intimidad del que expresa, se hace verdad, se hace carne, se hace vida...



jueves, 16 de diciembre de 2010

Confesiones de niño lobo...Confesión 2 a mi primera polola y mi bici,

a los mas menos 5 años en Reñaca;

Tenía yo cinco años,
tenía yo los pelos bien rubios y los cachetes bien gordos,
tenias tú... no me acuerdo bien, el pelo negro, unos rulos quizás,
eras tú... mi primera polola con seguridad,
eramos los dos, unos niños en su totalidad,

Viajábamos en mi cleta,
recorrimos juntos las calles de tierra del antiguo Reñaca,
viajábamos quizás donde...,
una vez montabas en la cleta,
solos los dos, niños y aventureros, nos hechabamos a volar,
recorrimos manzanas, ciudad, mundos, mares en mundos,
anduvimos y anduvimos, conversando no sé de que,
riendo no sé de que, jugando a no sé que,
solos los dos, enamorados quizás desde una vida anterior,

tú y yo, y mi cleta de compañera eramos invencibles, inseparables,
tú y yo, eramos dos niños sin nostalgias, sin penas,
sin miedos, dos niños sin verguenzas,

todo estaba bien, hasta el día en que,
por querer ser mas rubio de lo era,
te dije una niñez,
te dije que Argentino era,

No me acuerdo que respondiste,
como te pusiste, ni tampoco si te enojaste,
si me acuerdo que desde ese día,
ya no te quisiste subir más a la cleta...,
no recuerdo si explicaciones te pedí,
o si a tu casa volví a ir, ni tampoco que sentí...,

Ya no se en que mundos andas,
tampoco sabes tú en que mundos ando yo,
pero quizás en una próxima vida,
vuelva yo a subirte a mi cleta,
y sin querer ser mas rubio o moreno de lo que sea,
pueda yo contigo continuar,
recorriendo nuevos mares, mundos,
y quizás hasta planetas,
para así con una nueva cleta, contigo en ella,
y conmigo como sea,
una vida ya completa, poder dibujar.





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